Redacción y fotografía, por: Zulma Palacios
El 8 de marzo, es una fecha mundial, en la que las mujeres de todo el mundo nos unimos para conmemorar la lucha de un grupo de ellas por lograr la igualdad con los hombres dentro de la sociedad el trabajo y el derecho a la vida.
Con esta premisa, el pasado 9 de marzo IDARTES decidió recordarnos esta fecha a ritmo de música, a ritmo de sonidos extremos que nos elevan, desinhiben y sobre todo nos dan la oportunidad de ser nosotras y respetarnos no solo dentro de sus formas de vestir sino dentro de sus letras y mensajes.
El sábado pintaba con un clima extraño, característico de Bogotá, lo cual no fue impedimento para que los jóvenes, adolescentes y adultos de todos los rincones de Bogotá y hasta del país se dieran a la tarea de cumplir la cita con La serenata Ska Punk y Reggae. Sobre las 3:00pm las calles aledañas al Teatro Al Aire Libre La Media Torta, se vestía de negro, jeans rotos, taches, cabellos de colores y todo tipo de looks característicos de estos géneros.
Con un lleno total, La Media Torta comenzaría su fiesta a ritmo de ska. Con La Urband, la rumba, los coros y las mujeres bellas serian los protagonistas del comienzo de una tarde genial. Bailamos, recordamos viejas canciones, disfrutamos de los buenos ritmos de los vientos y la mejor energía de cada acorde y cada uno de los artistas.
Como La Urband, The Klaxon dejó por lo alto el mejor sonido del reggae/ska una fiesta total que aún estaba impaciente por un gran cierre internacional. De pronto como un obsequio para todos los asistentes de La Media Torta, saldría al escenario David Mujica, vocalista de Skampida y junto a esta sorpresa los asistentes encloquecieron en el momento en que al escenario saldría Triple X.
Un desgarre de punk capitalino, sabor tanto en el escenario como dentro del público; pogos, crestas y coros que alegraban y levantaban la energía de las gradas de La Media Torta. Todo estaba listo para que el cierre de la serenata fuera un estallido de emociones y rumba total.
Sale del escenario Triple X y todo nos anunciaba que Los Rabanes estaban próximos a aterrizar y cerrar con broche de oro una tarde de celebración y conmemoración.
Las luces combinaban perfectamente con los colores del atardecer capitalino, cuando de pronto llegarían Los Rabanes para que el público se prendiera completamente, bailar a ritmo de ska, corear canciones, hacer pogos rumberos y disfrutar de todos y cada uno de los ritmos que mejor manejan y saben sacarle el jugo estos panameños.
Tal seria la alegría de la fiesta que, Christian, el maestro Pipón, bajaría del escenario a bailar, gozar y cantar con todo el público, y más adelante se daría el gusto de cantar algo de lo nuestro. Con una canción de Carlos Vives, los ánimos continuaban en lo más alto del corazón de la capital.
Esto son Los Rabanes, alegres, parranderos y sobre todo muy cercanos a su público. Tan cercanos y fieles a su público son que a mitad del show los invitarían a ser participes de una de sus canciones y entre público y artistas se cerro la mejor fiesta de la capital conmemorando a la mujer. Alegría, celebración, fiesta, camaradería y sobre todo fotos, videos y selfies fueron el cierre de una tarde de ska, punk y reggae.