Fotografía: Michelle Tobo
Redacción: Zulma Palacios
El pasado 5 de julio, los bogotanos tuvimos la oportunidad de disfrutar de una de las bandas más legendarias del heavy metal español.
El escenario del Ace Of Spades le abriría las puertas a la nostalgia, agresividad e historia que consigo lleva desde hace más o menos 32 años la banda española liderada por Alberto Rionda, Avalanch como siempre amigos del público nos dejaron ver su profesionalismo y el respeto que le tienen a la música, la cual los ha mantenido y ha llenado de orgullo a cada uno de sus fans.
En esta ocasión, Colombia tenía la obligación de dejar en alto el nombre del país a nivel musical demostrando que el talento del metal en español es serio, hecho con amor y carácter. Esta labor se dejaría en manos de la banda Arkhanon. Quienes en un recital de aproximadamente 1 hora nos mostraron el amor que le tienen al público, el cómo a través de los años su calidad ha ido en crescendo, su sencillez y sobre todo el orgullo de poderle abrir a una de las bandas que más admiran fue algo que en el escenario quedó plasmado todo el tiempo. “Esperamos este momento por más de 15 años y hoy por fin tenemos el honor de abrir el show de una de las bandas que más admiramos y respetamos, esto nos llena de orgullo y nos motiva a llegar más lejos” dijo Nicolás, vocalista líder de Arkhanon.
Con un increíble set list donde el público coreaba y ovacionaba sin cesar quedó claro que el talento nacional es profesional, de calidad y sobre todo muy bien trabajado. Estos soachunos cerrarían su intervención en el escenario con un sentido homenaje al siempre querido y recordado Elkin Ramírez y con esto el público quedaría con la batería al 100% para lo que Avalanch tendría preparado para el público capitalino.
Comenzando el show nada más ni nada menos que con ‘El oráculo’ la noche pintaba espectacular, seguido de esta vendría un recorrido musical impresionante donde al público se le complació de principio a fin. Canciones como ‘Aún respiro’, ‘El dilema de los dioses’, ‘Horizonte eterno’, ‘Alas de cristal’, ‘Pies de barro’, ‘Mil motivos’, ‘Niño’, y ‘Delirios de grandeza’ poco a poco iban creando un espectacular set lis del que sabíamos aún hacia falta mucho más.
La camaradería entre entre José y el público lograba romper la brecha entre banda y fans, entre tarima y espacio… a un extremo de la tarima podíamos ver como Alberto no podía ocultar la emoción que sentía cuando todos cantábamos a una sola voz las canciones que una tras otra iban pasando y claramente se iban disfrutando.
Luego de un solo de batería muy inclusive para lo que seguiría de una noche de heavy metal histórico llegarían canciones como ‘Antojo de un dios’ que hicieron que la voz de José se perdiera entre el público pues todo buen fan de Avalanch sabe y conoce muy bien este señor clásico que acompañado por ‘Hoy te he vuelto a recordar’, ‘El peregrino’ y ‘Lucero’ nos dejaban muy en claro que el detalle fue la clave al momento de escoger una a una cada canción para una noche sublime.
Luego de ovacionar y aplaudir a Alberto este nos agradeció con un espectacular solo de guitarra que aunque nos anunciaba que el final de un show memorable se acercaba nos reafirmaba porque este hombre es tan virtuoso y lleva tantos años al pie del cañón dando de que hablar y trabajando fuertemente por su banda.
Todo lo bueno siempre tendrá un final y tristemente aquella noche tendría que llegar a su fin, pero, querido lector, si usted es seguidor del heavy metal español y le encantó la apertura de este show, el cierre lo dejaría más que satisfecho pues el honor se lo otorgaron nada más ni nada menos que a ‘Torquemada’, clásico de clásicos, canción con la que muchos conocimos esta banda y decidimos darle la oportunidad en nuestros dispositivos de música.
La organización brillo por su cumplimiento y orden en el evento, la banda telonera por su calidad profesional y sencillez, la banda principal por su autenticidad, humildad y sobre todo por ser tan amigos, profesionales y cómplices de una generación completa que los sigue y seguirá escuchando.
